sábado, 12 de julio de 2025

Dos ramas y un Árbol

 



Éramos dos ramas,

nacidas lejos en tiempo y raíz,

pero el viento sabio anciano errante

nos trajo al mismo árbol.


Tú, hoja tenaz en otoño,

yo, brote testarudo en primavera,

nos abrazamos no por azar,

sino porque el tronco nos reconoció

como parte del mismo destino.


Quererte tanro no es entrelazarse en días de sol,

sino sostenerse cuando el cielo truena.

Las ramas que perduran no compiten,

crecen en direcciones distintas,

pero se inclinan hacia la misma luz.


Y si un día el árbol cae,

no será ruina, sino semilla,

porque cuando el amor echa raíz

enseña más que mil primaveras.

Nos enseña que lo fuerte no es lo que no se rompe,

sino lo que florece después. T


lunes, 7 de julio de 2025

AMOR SIN PALABRAS

 



"Carta desde mi mundo de estrellas"


Mamá,

no sé cómo decirte que te amo con las palabras del mundo que todos usan…

pero en mi mundo, donde los colores hablan, los sonidos son suaves como plumas,

y los pensamientos vuelan como mariposas invisibles,

yo te lo digo todos los días con mi corazón entero.


En mi mundo hay un bosque que canta.

Las hojas susurran tu nombre cada vez que el viento pasa.

Las estrellas brillan más fuerte cuando pienso en ti.

Y hay una luciérnaga que vive en mi pecho  esa eres tú

siempre encendida, guiándome cuando me pierdo entre ruidos y sombras.


A veces me ves callado, mirando lejos.

No es que no te escuche…

Es que estoy viajando en una nave de cristal por mi universo secreto,

y tú vas conmigo, siempre conmigo,

porque tú eres la única que entiende cómo volar sin alas.


Tú me entiendes sin que tenga que hablar.

Sabes que un abrazo mío es una declaración de amor más grande que mil palabras.

Y que cuando repito las cosas una y otra vez,

es mi manera de ordenar el mundo para que sea menos ruidoso,

menos confuso… más bonito… más como tú.


Si pudiera, te construiría un castillo en el cielo,

con nubes de algodón y estrellas atrapadas en frascos,

y te pondría una corona de girasoles,

porque para mí tú eres la reina de todos mis días buenos.


Mamá, no sé decirlo como otros niños,

pero en mi idioma de luces, silencios y sueños…

yo te digo que te amo más allá de todos los mundos.


Y aunque a veces parezca que estoy lejos,

quiero que sepas que en mi corazón tú vives más cerca que nadie.

Eres mi hogar.


Con amor de tu hijo,

el que habla con el alma. T